Por el personal del Espíritu Católico
El Obispo John E. McCarthy, tercer obispo de la Diócesis de Austin, falleció el día 18 de agosto en su hogar en Austin.
Hijo de George and Grace (O’Brien) McCarthy, nació en Houston el 21 de junio de 1930. Producto de la educación Católica, asistió al St. Mary’s Seminary y la Universidad de St. Thomas, obteniendo una licenciatura en 1956. El 26 de mayo del mismo año, se ordenó como sacerdote Católico Romano en la St. Mary Cathedral Basilica en Galveston.
Su ministerio en la iglesia comenzó en St. Pius Parish, Pasadena donde inauguró un programa de ministerio social en la parroquia. Él disfrutaba contando cómo daba una bolsa de víveres a sus parroquianos y les pedía que se la llevaran a una familia necesitada, dando así la oportunidad al que la entregaba de entender mejor las causas y ramificaciones de la pobreza.
Él citaba la Escritura “por sus obras los conocerán” con frecuencia durante su carrera, la cual incluyó, primero las Parroquias de St. Cecilia y de All Saints en Houston, antes de ser de-
signado director ejecutivo del Comité de los Obispos para los Católicos de Habla Hispana con base en San Antonio. Una de las acciones más notables del comité durante su permanencia fue el apoyar a trabajadores de granjas a mejorar su situación.
Un periodo de dos años en Washington de 1967 a 1969, le permitieron ser uno de los fundadores de la Catholic Campaign for Human Development, actualmente el mayor esfuerzo doméstico contra la pobreza de los obispos. En medio de una nación consumida por el racismo y la pobreza sistemática, el CCHD (por sus siglas en inglés) proveyó un medio para que las comunidades locales pudieran tener los fondos para programas de auto ayuda e hicieran responsables a líderes civiles de mejoras comunitarias. Durante un retiro de fin de semana, McCarthy y otros sacerdotes socialmente conscientes delinearon los conceptos iniciales del CCHD. En 1970, los obispos de Estados Unidos lanzaron la campaña, designando que proveyera de fondos para “proyectos tales como el registro de votantes, organizaciones comunitarias, escuelas manejadas por las comunidades, cooperativas de minorías y uniones crediticias, capital para el desarrollo industrial y programas de entrenamiento para el empleo, y el establecimiento de cooperativas rurales”.
El Padre McCarthy regresó a Houston en 1969 como pastor de St. Theresa Parish. Ahí, él desarrolló un programa de “Hermanas en Servicios Sociales” el cual se convirtió en un modelo adoptado por Catholic Charities USA como un ministerio social parroquial. En 1973, fue nombrado director ejecutivo de la Texas Catholic Conference, la agencia estatal de los obispos de Texas. Seis años más tarde, fue designado obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Galveston-Houston.
En 1986 fue designado tercer obispo de Austin. De muchas maneras, Austin era todavía un pueblo estudiantil somnoliento. La diócesis tenía cerca de 115,000 Católicos que se reunían en 107 parroquias. El consejo más citado del Obispo Vincent Harris para su sucesor fue que se mantuviera fuera de la antigua rivalidad entre las dos grandes universidades en la diócesis, los Aggies y los Longhorns. Para el momento en el que Bishop McCarthy se retiró, 14 años más tarde, había cerca de 400,000 Católicos y 20 parroquias más. Él comenzó un remolino de esfuerzos para cumplir con las necesidades de esta creciente diócesis, estableciendo programas misioneros en el extranjero y en el país, animando a las parroquias a mejorar su trabajo social y caritativo, y abriendo escuelas Católicas y parroquias mientras más gente se mudaba al área de Austin. Él también lanzó el primer Sínodo de la diócesis, expandió su centro de retiros, estableció el Diocesan Law Project el cual organizó cientos de abogados voluntarios e intérpretes para que proveyeran de servicios legales gratuitos a aquellos necesitados, y supervisó iniciativas mayores con una parroquia cerca de Monterrey, México y la Diócesis de Juticalpa, Honduras. Tal vez todo su trabajo puede resumirse en su conclusión clásica, “Sigamos adelante, y sigamos juntos”.
Después de su retiro, el 2 de enero de 2001, el Obispo McCarthy disfrutó de numerosos hobbies, incluyendo un blog. En 2013 publicó una colección de sus escritos “Off the Cuff and Over the Collar: Common Sense Catholicism.” Es sobrevivido por su cuñada, Charlene McCarthy de Houston, y su familia extendida.
La familia recomienda respetuosamente las donaciones al Bishop John McCarthy Memorial Fund, 6225 E US 290 HWY SVRD EB, Austin, TX 78723.